A medida que los consumidores de diamantes se vuelven más conscientes social y ambientalmente, la elección entre diamantes naturales y diamantes cultivados en laboratorio se ha convertido en un tema de debate. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas, y en última instancia depende de la preferencia personal. Sin embargo, en términos de calidad y diseño, Pascal ofrece diamantes cultivados en laboratorio excepcionales que vale la pena considerar.
Los diamantes naturales se forman en lo profundo del manto terrestre durante millones de años bajo alta presión y temperatura. Son valorados por su rareza, belleza y durabilidad, y se han utilizado como símbolo de amor y compromiso durante siglos. Sin embargo, el proceso de minería de diamantes naturales puede tener impactos ambientales y sociales negativos. Puede provocar erosión del suelo, deforestación y contaminación del agua. También existen preocupaciones sobre la explotación de trabajadores en las minas de diamantes.
Por otro lado, los diamantes cultivados en laboratorio se crean en un entorno controlado de laboratorio usando tecnología avanzada que simula las condiciones bajo las cuales se forman los diamantes naturales. Tienen las mismas propiedades físicas, químicas y ópticas que los diamantes naturales y son prácticamente indistinguibles de ellos. Los diamantes cultivados en laboratorio también son más asequibles que los diamantes naturales, lo que los convierte en una opción popular para consumidores con presupuesto limitado.
¿Es el diamante cultivado en laboratorio un diamante real?
Los diamantes cultivados en laboratorio son diamantes reales, idénticos en términos de dureza y durabilidad. Los diamantes cultivados en laboratorio tienen muchas de las mismas propiedades que los diamantes naturales, y en condiciones de laboratorio, el diamante es una forma perfectamente estable de carbono. Al igual que con los diamantes naturales, los diamantes cultivados en laboratorio pueden ser facetados en corte brillante u otras formas.
Con la misma tecnología utilizada para crear diamantes naturales, los diamantes cultivados en laboratorio se cultivan bajo condiciones controladas usando alta presión y alta temperatura para formar una intrincada red tridimensional de átomos de carbono.
El Gemological Institute of America (GIA), el laboratorio de certificación de diamantes más grande del mundo, ha estado calificando diamantes cultivados en laboratorio desde 2007 y ya no utiliza el término “sintético” en sus informes. El GIA ha certificado a más de 20 productores de diamantes cultivados en laboratorio en su laboratorio y ha llamado a estos diamantes 'naturales' para fines de calificación.
Otra ventaja principal de los diamantes cultivados en laboratorio es que son éticos y responsables con el medio ambiente. El proceso de creación de diamantes cultivados en laboratorio es sostenible y no implica el impacto negativo de la minería de diamantes. Además, los diamantes cultivados en laboratorio son libres de conflictos, lo que significa que no están asociados con abusos de derechos humanos ni con el financiamiento de conflictos armados.
Conclusión
Mientras que el diamante natural es ecológico, el diamante cultivado en laboratorio tiene propiedades similares al diamante natural pero sin los impactos ambientales de la minería de diamantes naturales. Además, el diamante cultivado en laboratorio es más rentable que el diamante natural y también ofrece alta brillantez y claridad en la piedra preciosa.
Si comparamos tanto el diamante natural como el diamante cultivado en laboratorio, queda claro que son completamente idénticos en términos de calidad y rendimiento. Por lo tanto, puedes optar por el diamante natural si quieres algo más natural, pero si deseas algo más brillante y claro, elige la piedra preciosa creada en laboratorio.